El café turco no es un tipo de café en sí, más bien es una manera de prepararlo. De esta manera, el café turco se prepara hirviendo el café en agua.
Es decir, se pone agua en un recipiente especial (cezve) y se calienta hasta la ebullición. A continuación, se añade una cucharadita de café por persona.
Con el primer hervor, obtenemos una espuma que se debe servir en las tazas con una cucharita pequeña.
Volvemos a colocar el cezce en el fuego, bajamos ahora la temperatura al mínimo y cuando vuelva a hervir llenamos las tazas a la mitad. Repetimos la operación, añadiendo una cucharadita de agua fría para que los posos se vayan al fondo, y lo repartimos en las tazas.
Es necesario que los posos se asienten antes de servirlos. De este modo, se obtiene un café bastante cargado de sedimentos en la taza.
¿Qué es el café turco?
El café turco es una modalidad de preparación del café muy popular en Turquía y los países vecinos. En Turquía se le llama kahve o Türk kahvesi. En realidad, no se trata de un tipo de grano de café, sino un método de preparación del mismo.
Este método es uno de los primeros documentados para preparar el café. Esta forma de preparar el café es conocida como decocción. Una decocción es el proceso de calentar o hervir una sustancia en un líquido.
De hecho, el café turco se hace en un cezve con café recién molido. Una cezve es un pequeño recipiente con un mango largo y un labio para verter. Los cezve también son conocidos como ibriks fuera de Turquía, y los dos términos se emplean indistintamente.
Preparación del café turco
Hacer café turco es fácil y no requiere ninguna habilidad especial. Se recomienda usar agua fría y filtrada. Para medir la cantidad de agua para cada taza, se emplea como medida la taza de café en la que se va a tomar.
En cuanto a las proporciones de agua para el café turco, es recomendable usar 1½ «taza» de agua por taza.
Para cada taza de café, se mide una cucharada colmada de café molido. Si se prepara una taza con azúcar, se debe agregar al inicio, removiendo la mezcla hasta que se disuelva.
El siguiente paso es llevar la mezcla lentamente a ebullición a fuego medio. Esto toma entre 3 y 4 minutos, debe vigilarse muy de cerca.
Es importante servir el café turco con espuma en la superficie. Cuando la mezcla esta a punto de hervir, se usa una cucharilla para transferir parte de la espuma a cada taza de café.
Granos para el café turcos
El café turco es un producto elaborado con granos de café de tueste oscuro. En consecuencia, el café turco es conocido por ser oscuro y fuerte. Normalmente, se suelen utilizar granos de café arábica.
Es muy importante que el café este muy molido, mucho más del que se utilizaría para un café espresso. Se debe alcanzar una textura parecida a la del azúcar glas.
Para alcanzar esta textura, se requiere un molinillo especialmente bueno, o utilizar café ya molido especial para preparar café turco.
El café turco es de sabor fuerte e intenso gracias a su ebullición, sin rastros de acidez. Además, al no estar filtrados sus granos, presenta una textura distinta que podría no gustar a algunas personas al principio.
A veces, al café turco se le añade azúcar y especias como el cardamomo y el clavo. En las cafeterías normalmente se sirve en una bandeja, acompañado de un pequeño vaso de agua y un dulce como una delicia turca por ejemplo.
¿Se puede hacer café turco usando una máquina de café expreso?
Es posible preparar un café turco con una máquina de café espresso, pero no tendrá el mismo sabor. Los posos del café turco son más finos que los del café espresso, lo que hace que el sabor resulte poco agradable cuando se introduce en el portafiltro.
Este tipo de posos en una máquina de café espresso se sobreextraen, lo que también quiere decir que tendrían un sabor agrio o fuerte.
En cambio, si por el contrario se ponen granos de café muy gruesos, el resultado es un espresso muy insípido.
Perfil
- Periodista y redactora apasionada del café en todas sus formas. Madrileña de nacimiento y convicción, trato de mejorar cada día y odio las redes sociales.